LA MUJER Y LA EDUCACIÓN Se recordará que los primeros en preocuparse por la enseñanza de la mujer, si bien anhelaban que se educara, muy lejos estaban de concebir transformaciones sustantivas para ellas, ni en su situación respecto del hombre ni en su papel...
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LA MUJER Y LA EDUCACIÓN Se recordará que los primeros en preocuparse por la enseñanza de la mujer, si bien anhelaban que se educara, muy lejos estaban de concebir transformaciones sustantivas para ellas, ni en su situación respecto del hombre ni en su papel en el seno de la sociedad. Clara Zabala al poner en marcha a su costo en 1794, una Escuela gratuita para alumnos, en nada pretendió cambiar las costumbres familiares de la época sobre crianza de niñas. La discrepancia de 1830 entre los dos defensores de la mujer: de Curel y Sastre, se desarrolló sin que a ninguno de los que polemizaban se le ocurriera modificar su estatus de subordinación. José Manuel Pérez Castellano, en “Observaciones sobre agricultura (1813)”, se limita a afirmar que las mujeres “son más a propósito” que el hombre para los injertos, “por tener los dedos más finos y delgados”, y que de dedicarse muchas de ellas a esa actividad, se fomentaría en general la agricultura, ya que, por el “natural atractivo que tienen s
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