Cambiando ideas Era un día lluvioso, y Martina fue a la casa de su abuela Teresa. Cuando llegó le dijo: Abuela ¿por qué no me cuentas una historia de cuando eras pequeña? Qué hace mucho frio fuera. Se sentaron las dos al lado de la chimenea con una taza de...
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Cambiando ideas Era un día lluvioso, y Martina fue a la casa de su abuela Teresa. Cuando llegó le dijo: Abuela ¿por qué no me cuentas una historia de cuando eras pequeña? Qué hace mucho frio fuera. Se sentaron las dos al lado de la chimenea con una taza de chocolate caliente, - abuelita, abuelita se nos ha ido la luz -dice Martina y encima ¡nos hemos quedado sin leña! –cariño, cariño ¿Dónde estás? No te veo -Abuela tengo miedo ¿Qué hacemos? -¡vamos a buscar al abuelo, él sabrá que hacer! Mientras iban en busca del abuelo, Martina le pregunto a su abuela… - Abuela, ¿Qué hacías en tus tiempos cuando se iba la luz? -Martina, en mis tiempos no había luz. La luz era el sol y el fuego en invierno. Dice la abuela. Cuando llegaron al huerto, que es donde trabajaba el abuelo, le pidieron leña y una antorcha. El abuelo se lo dio. Cuando volvieron a la casa, encendieron el fuego y pusieron una gran antorcha que alumbraba todo el salón. -Abuelita, ¿en que trabajabas en tu juventud? Pregunta Martin
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