La seducción es cosa de a dos, pero a veces también necesitas aprenderla. El problema es que la vida real no es una clase de seducción, ahí el joven galán no lleva una rosa en la boca ni baila al compás de un tango, en la vida real, los hombres como...
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La seducción es cosa de a dos, pero a veces también necesitas aprenderla. El problema es que la vida real no es una clase de seducción, ahí el joven galán no lleva una rosa en la boca ni baila al compás de un tango, en la vida real, los hombres como Cristóbal Steel tienen detrás de sí una legión de mujeres, y tú, una maestra de seducción sabes que no serás la próxima en la fila.
¿Qué pasa cuando las clases quieren ponerse en práctica? Averígualo en...
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