¡SHH.
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! ME HICE
PIS
Fea como una bruja, la nueva maestra entró de
repente a la salita y se presentó, diciendo:- soy
Sara, suplente de la señorita patricia que está
enferma.
Todos ahí, mudos; menos Pía, que le preguntó
qué tenía Patricia.
Y ella, con...
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¡SHH.
.
.
! ME HICE
PIS
Fea como una bruja, la nueva maestra entró de
repente a la salita y se presentó, diciendo:- soy
Sara, suplente de la señorita patricia que está
enferma.
Todos ahí, mudos; menos Pía, que le preguntó
qué tenía Patricia.
Y ella, con cara de mala, dijo
que no sabía.
Juan, que habla con la “z”, me dijo:-Lola, ¿mirá
zi Patrizia ze muere?
-no, nene, si no es viejita.
-zi la pezca el virus hambriento, eztá frita,
pobre Patrizia.
¡Pum! Me hizo el corazón, y me quedó algo
aquí, en la garganta.
Caramelo no era, porque
me había comido antes.
La suplente dibujó un sol en el pizarrón.
Triste y feo era el sol.
Patricia dibujaba soles
con risa, rojos y amarillos.
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