LILITH
El sueño se desvanece y al final del letargo acompaña una melodía.
Procede de una caja
de música, tenue, dulce, familiar.
Las notas se deslizan hasta mi perpetuo lecho nocturno,
sepulcro de mi vanidad y destierro, allí, donde una creciente sed...
More
LILITH
El sueño se desvanece y al final del letargo acompaña una melodía.
Procede de una caja
de música, tenue, dulce, familiar.
Las notas se deslizan hasta mi perpetuo lecho nocturno,
sepulcro de mi vanidad y destierro, allí, donde una creciente sed de sangre arrincona mi
humanidad.
El sol se ha olvidado de iluminar mi rostro y ya solo el fuego revela mis inmortales
rasgos.
No hay pulso ni aliento que marque mi estancia en este mundo.
Pero aquella
música puede conseguir que palpite este corazón abandonado a cualquier síntoma de vida,
arrastrándome a una sensación desconocida, apreciando por primera vez desde mil
eternidades el rostro de aquel que marcaría mi destino.
Observo el mecanismo que hace surgir las notas, testigos de mi larga letanía.
“Lilith”,
pronuncian mis labios como una plegaria al deseo de mi propio olvido, mientras el
particular sonido se adhiere a mi pálida piel, vistiéndome de recuerdos.
Mi mano detiene el metal en movimiento, parando la
Less