Todosllegamosaunlugardelmundoconunacargademaravilla,espontaneidad,juegoybrillopropio.
Sinembargo,
no esperamos encontrarnos con un mundo que inmediatamente comienza a mirarnos de manera diferente: nos
miran por el color de nuestra piel, de nuestros ojos, de...
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Todosllegamosaunlugardelmundoconunacargademaravilla,espontaneidad,juegoybrillopropio.
Sinembargo,
no esperamos encontrarnos con un mundo que inmediatamente comienza a mirarnos de manera diferente: nos
miran por el color de nuestra piel, de nuestros ojos, de nuestro
cabello; por la ausencia o presencia de curvas, agilidad, altura,
peso o lugar donde nacimos, y un sin fín de cosas sobre las
cuales uno jamás decidió.
Y eso duele, y duele mucho.
Tanto
que a veces llega a dañar nuestra visión de nosotros mismos,
de nuestro lugar en la vida, de nuestras capacidades.
Muchas veces sabemos que tenemos tanto para dar o que
necesitamos tanto del otro y, sin embargo, no podemos
hacerlo ni tenemos con quien charlarlo.
A veces papá y mamá no se dan cuenta de ésto y no pueden
ayudarnos, o no saben cómo hacerlo o a veces, incluso, hasta
ellos mismos nos miran como si fuésemos marcianos.
Entonces, ¿qué tengo que hacer?.
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Prejuicio y Discriminación
¿Por qué mis compañeros me hacen
sentir difere
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